Estoy sola y un hombre viene hacia mi con la clara intención de agredirme.
Esto sucede varias veces consecutivas, como sí una y otra vez la imagen volviera a empezar.
Yo cada vez intento defenderme de una manera distinta pero nunca consigo parar la agresión.
Primero le intento disuadir con la palabra y más tarde paso a la acción golpeando con un objeto...pero de nada sirve.
En un momento dado pasa por allí un gran grupo de personas, las conozca a todas, somos amigos, van encadenadas arrastrando un objeto pesado todas juntas...yo intento que me ayuden, pero ni me miran ni pueden verme, ellos no pueden hacer nada por mi.
La imagen vuelve a empezar...el hombre se acerca de nuevo con la misma intención de agredirme, pero ahora yo pronuncio la siguiente frase como única defensa: CONTEMPLO A DIOS EN TI.
El hombre se queda parado, sorprendido por mis palabras se va haciendo a un lado, baja la vista y su cara se transforma, es como sí escuchase esas palabras por primera vez, se queda ensimismado en sus pensamientos.
Mis amigos en ese momento son liberados de su carga y de sus cadenas y muy contentos se acercan a mi, y en ese mismo momento en mis manos aparece un talón con muchos ceros fruto de "mi trabajo con los corderos".
Alguien se me acerca y me pregunta si tengo tres corderos lechales, le contesto que no que no me quedan pequeños, en ese momento uno de mis amigos me sugiere que eso no es problema, que con el dinero que tengo puedo comprar los que yo quiera.
Y el sueño se acaba con un gran contento de todos por la prosperidad que compartimos.
¿Quienes son los corderos Marian?
Jesús era El Cordero de Dios que quita los pecados del mundo.
Creo que hay algo sobre liberar de las cargas borrando la culpa porque todos somos inocentes aunque nos hayamos creído culpables.
Creo que el sueño tiene que ver con la Terapia del Alma y Ho´oponopono...y con algo que comprendí durante la misa del Sábado de Gloria: Cuando Jesús dice en la cruz "Padre perdonalos porque no saben lo que hacen", esta haciendo Ho´oponopono.
Jesús en la cruz asume los pecados del mundo, los trabaja en él, a través de la crucifixión se rompe el ego, se convierte en un espejo para los que quieran verse reflejados en él, y así nosotros podemos obtener la salvación.
Creo que mi trabajo con los corderos sugiere mi trabajo con los inocentes, con los libres de pecado, de culpa, de enfermedad, es decir con todos, es decir, con todos aquellos a los que sintiéndose culpables o enfermos yo pueda devolver a la conciencia de perfección, a la inocencia original por el simple método de contemplar en ellos Su Divinidad, viendo en ellos al Cristo, contemplando en ellos al Cordero del Mundo a través de la Terapia del Alma y el Ho´oponopono
Creo que en este sueño se me han dado pautas para trabajar en las terapias, la cosa es que he tardado más de dos meses en poder interpretar el sueño desde que lo escribí, y ha sido justo después de liberarme de una situación en la que no me sentía muy cómoda, y en la que me sentía de alguna forma falta de libertad y oprimida...y ahora que caigo, encontrarme contigo el otro día en el metro!!
Creo que a la vez el sueño sugiere que el perdón es la verdadera liberación, y que solo cuando los demás estén libres yo también podre sentirme libre, que es la familia carmica en su totalidad la que progresa cuando uno de nosotros progresa.
Y que solo, cuando yo perdone, quedaré verdaderamente liberada.
Esta vuelta a la inocencia me sugiere muchas cosas: volvernos como niños, contemplar el mundo sin juicio, observar desde lo que podemos llamar mirada de principiante, es decir como si lo viéramos todo por primera vez, lo que nos aparta de la reacción y nos permite actuar como respuesta al momento presente libre de condicionamientos mentales...
Bueno, no sigo interpretando, demasiado profundo el sueño, se me ocurren demasiadas cosas que decir...
En fin, muy fuerte el sueño.
Esto sucede varias veces consecutivas, como sí una y otra vez la imagen volviera a empezar.
Yo cada vez intento defenderme de una manera distinta pero nunca consigo parar la agresión.
Primero le intento disuadir con la palabra y más tarde paso a la acción golpeando con un objeto...pero de nada sirve.
En un momento dado pasa por allí un gran grupo de personas, las conozca a todas, somos amigos, van encadenadas arrastrando un objeto pesado todas juntas...yo intento que me ayuden, pero ni me miran ni pueden verme, ellos no pueden hacer nada por mi.
La imagen vuelve a empezar...el hombre se acerca de nuevo con la misma intención de agredirme, pero ahora yo pronuncio la siguiente frase como única defensa: CONTEMPLO A DIOS EN TI.
El hombre se queda parado, sorprendido por mis palabras se va haciendo a un lado, baja la vista y su cara se transforma, es como sí escuchase esas palabras por primera vez, se queda ensimismado en sus pensamientos.
Mis amigos en ese momento son liberados de su carga y de sus cadenas y muy contentos se acercan a mi, y en ese mismo momento en mis manos aparece un talón con muchos ceros fruto de "mi trabajo con los corderos".
Alguien se me acerca y me pregunta si tengo tres corderos lechales, le contesto que no que no me quedan pequeños, en ese momento uno de mis amigos me sugiere que eso no es problema, que con el dinero que tengo puedo comprar los que yo quiera.
Y el sueño se acaba con un gran contento de todos por la prosperidad que compartimos.
¿Quienes son los corderos Marian?
Jesús era El Cordero de Dios que quita los pecados del mundo.
Creo que hay algo sobre liberar de las cargas borrando la culpa porque todos somos inocentes aunque nos hayamos creído culpables.
Creo que el sueño tiene que ver con la Terapia del Alma y Ho´oponopono...y con algo que comprendí durante la misa del Sábado de Gloria: Cuando Jesús dice en la cruz "Padre perdonalos porque no saben lo que hacen", esta haciendo Ho´oponopono.
Jesús en la cruz asume los pecados del mundo, los trabaja en él, a través de la crucifixión se rompe el ego, se convierte en un espejo para los que quieran verse reflejados en él, y así nosotros podemos obtener la salvación.
Creo que mi trabajo con los corderos sugiere mi trabajo con los inocentes, con los libres de pecado, de culpa, de enfermedad, es decir con todos, es decir, con todos aquellos a los que sintiéndose culpables o enfermos yo pueda devolver a la conciencia de perfección, a la inocencia original por el simple método de contemplar en ellos Su Divinidad, viendo en ellos al Cristo, contemplando en ellos al Cordero del Mundo a través de la Terapia del Alma y el Ho´oponopono
Creo que en este sueño se me han dado pautas para trabajar en las terapias, la cosa es que he tardado más de dos meses en poder interpretar el sueño desde que lo escribí, y ha sido justo después de liberarme de una situación en la que no me sentía muy cómoda, y en la que me sentía de alguna forma falta de libertad y oprimida...y ahora que caigo, encontrarme contigo el otro día en el metro!!
Creo que a la vez el sueño sugiere que el perdón es la verdadera liberación, y que solo cuando los demás estén libres yo también podre sentirme libre, que es la familia carmica en su totalidad la que progresa cuando uno de nosotros progresa.
Y que solo, cuando yo perdone, quedaré verdaderamente liberada.
Esta vuelta a la inocencia me sugiere muchas cosas: volvernos como niños, contemplar el mundo sin juicio, observar desde lo que podemos llamar mirada de principiante, es decir como si lo viéramos todo por primera vez, lo que nos aparta de la reacción y nos permite actuar como respuesta al momento presente libre de condicionamientos mentales...
Bueno, no sigo interpretando, demasiado profundo el sueño, se me ocurren demasiadas cosas que decir...
En fin, muy fuerte el sueño.
El perdón y la paciencia van de la mano.No sé en qué lugar leí "cuando la confianza es real la paciencia se vuelve eterna".Y es que cuando se trata de familia y de humanidad, al fin y al cabo, no hay otra que aliarse con las paradojas si de verdad queremos progresar. La paradoja del cordero, lo pequeño y lo grande...Diría yo que lo interpretas "divinamente" (je), quién como Cristo integrando, esperando, amando...Y ya estamos en los nuevos tiempos, ya se puede transmutar, curar, sanar, sin sacrificios sangrientos, sin chivos expiatorios, SIN CULPAS, CON RESPONSABILIDAD. Ya la sangre está en la alianza, EN EL CÁLIZ.Ya se ha realizado por nosotros, por amor. Ahora puestos al servicio enfocar el trabajo con los que se creen culpables y son inocentes es cambiar la SANCIÓN por la SANACIÓN, la SANTA ACCIÓN.Los ceros del talón, son círculos. Así como los círculos abundantes de la palabra Hoponopono ,así como el círculo inicial de la palabra oración, también el OM similar al de la palabra perdón, sanación....Los círculos de las mujeres en sus juegos, en sus corros, donde conciencia y útero se activan. La conciencia femenina sana la fragmentación con su cuerpo y llega la ola del orgasmo.La energía ,la fuerza. Curiosamente esos ceros están en un talón. ¿Y si imáginamos el talón como parte del cuerpo?. Esa articulación accionadora con apariencia matemática, masculina, pero compuesta de líquidos, de emoción sin los cuales no podríamos dar un paso. La fuerza del animús y el ánima (másculino y femenino)se fusionan y de ahí la abundancia, el equilibrio, la prosperidad del ocho infinito.
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