Esta noche a través del sueño me han contado una historia, que en este caso es la mía, pero que podía ser la de cualquiera.
Soy la participante en un gran juego, un juego muy arriesgado pero con posibilidades de muchas ganancias, muy excitante y en el que tengo muchas ganas de participar.
El organizador me presenta al resto de participantes miembros de mi equipo...vienen bajando la ladera de una montaña a toda velocidad sobre unos super-patines...
Cuando les veo venir le digo al organizador que no estoy a la altura de mis compañeros de equipo, que yo no sé patinar y que hay más cosas que no me atrevo a hacer, como puenting, por ejemplo...por una parte estoy decepcionada porque me apetecía mucho participar, pero la responsabilidad me asusta, si yo no lo hago bien mi equipo pierde...
El organizador me propone algo intermedio, que participe desde una isla desierta en la que realizaré aprendizajes especiales pero sin asumir todos los riesgos del juego, le digo que sí aunque no muy convencida...
Me llevan a la isla, en la que estoy acompañada de otro participante con el que tengo que aprender...un hombre de raza negra....
Al cabo de un tiempo que a mi me parece eterno, pregunto: cuanto tiempo llevamos aquí. La respuesta de mi compañero: tan solo un día.
¡¡Que aburrido es esto!! Contesto yo...
El sueño termina con una frase lapidaria: HAS VENIDO A HACER LO MÁS DIFÍCIL
Parece que la vida es una experiencia que solo vale la pena si nos atrevemos a asumir riesgos, a la que venimos con mucha ilusión y que tenemos que compartir con los que nos rodean, y que no podemos quedarnos a buen resguardo sin arriesgar si esperamos vivirla...porque en ese caso, solo se convertirá en un tiempo de espera aburrido cuyo desenlace final todos conocemos...
Desde que nacemos sabemos que nos iremos, pero mientras que estamos aquí podemos decidir como pasaremos las horas, y dar sentido a ese tiempo depende de nosotros y va a conllevar asumir ciertos riesgos y hacer cosas que antes nunca habíamos hecho...
Y negociar y descubrir nuestro lado oscuro, nuestra sombra, desarrollar lo menos evidente de nosotros (el hombre negro de mi sueño), lo más lejano a nosotros mismos, para cada vez ser más, para cada vez ser mejores, para poder cumplir con lo que hemos venido a hacer: Vivir la aventura de estar vivos.
Vivir es arriesgado, sí; pero quedarte al margen de la Vida es aburridiiiiisimo...y muy parecido a estar muerto. .
Soy la participante en un gran juego, un juego muy arriesgado pero con posibilidades de muchas ganancias, muy excitante y en el que tengo muchas ganas de participar.
El organizador me presenta al resto de participantes miembros de mi equipo...vienen bajando la ladera de una montaña a toda velocidad sobre unos super-patines...
Cuando les veo venir le digo al organizador que no estoy a la altura de mis compañeros de equipo, que yo no sé patinar y que hay más cosas que no me atrevo a hacer, como puenting, por ejemplo...por una parte estoy decepcionada porque me apetecía mucho participar, pero la responsabilidad me asusta, si yo no lo hago bien mi equipo pierde...
El organizador me propone algo intermedio, que participe desde una isla desierta en la que realizaré aprendizajes especiales pero sin asumir todos los riesgos del juego, le digo que sí aunque no muy convencida...
Me llevan a la isla, en la que estoy acompañada de otro participante con el que tengo que aprender...un hombre de raza negra....
Al cabo de un tiempo que a mi me parece eterno, pregunto: cuanto tiempo llevamos aquí. La respuesta de mi compañero: tan solo un día.
¡¡Que aburrido es esto!! Contesto yo...
El sueño termina con una frase lapidaria: HAS VENIDO A HACER LO MÁS DIFÍCIL
Parece que la vida es una experiencia que solo vale la pena si nos atrevemos a asumir riesgos, a la que venimos con mucha ilusión y que tenemos que compartir con los que nos rodean, y que no podemos quedarnos a buen resguardo sin arriesgar si esperamos vivirla...porque en ese caso, solo se convertirá en un tiempo de espera aburrido cuyo desenlace final todos conocemos...
Desde que nacemos sabemos que nos iremos, pero mientras que estamos aquí podemos decidir como pasaremos las horas, y dar sentido a ese tiempo depende de nosotros y va a conllevar asumir ciertos riesgos y hacer cosas que antes nunca habíamos hecho...
Y negociar y descubrir nuestro lado oscuro, nuestra sombra, desarrollar lo menos evidente de nosotros (el hombre negro de mi sueño), lo más lejano a nosotros mismos, para cada vez ser más, para cada vez ser mejores, para poder cumplir con lo que hemos venido a hacer: Vivir la aventura de estar vivos.
Vivir es arriesgado, sí; pero quedarte al margen de la Vida es aburridiiiiisimo...y muy parecido a estar muerto. .
Graaaacias, grache mile. Que bonito mensaje .Una vez más me dejo interpelar por tus entradas escritas en esta sección en tu blog. Y hoy en una pequeña elección he escogido el camino más comprometido, el que me sacaba de la isla, de esa cómoda situación de espectadora taninteresante pero que debe saber hacerse compatible con la vida, con la participación. Y todo ha fluido, ha ido bien. Muy bien. JUGAR el juego divino conectados al alma.AMAR, diluir el caparazón la armadura y ,como no, PERDONAR, PERDONARSE.
ResponderEliminarBSS